Fuente: larepublica.pe
Ante la amenaza para los jóvenes de embarazos no deseados o transmisión de enfermedades, esta alternativa presenta pros y contras pese a su aparente seguridad. ¿Lo ha practicado?
Esta es una escena de película:
Marla, una bella adolescente, discute histérica con su madre porque no le permite tener relaciones sexuales por primera vez. Llega Andy, el novio de la madre, y al ver la situación aconseja llevar a la joven al centro comunitario donde dan charlas sobre sexo adolescente. Ahí, la consejera indica que hay muchas actividades que pueden practicar sin tener sexo coital: frotación corporal, masturbación mutua o el masaje erótico. Al final Marla queda más confundida que al inicio. Puede que esta escena pertenezca a una comedia (Virgen a los 40), pero la realidad es que el sexo sin coito es una opción para quienes recién comienzan a vivir... o quienes desean tener experiencias diferentes.
Pero, ¿qué es el sexo sin coito?
Simplemente sexo sin penetración. El pene no se introduce y algunos también incluyen en la lista al sexo oral. De este modo, las parejas experimentan diferentes formas de besarse, se masturban mutuamente, rozan sus cuerpos el uno contra el otro, ven películas eróticas o utilizan juguetes sexuales.
Sus pros y contras
El sexo sin penetración es una de las formas más seguras de practicarlo. No tiene efectos secundarios de carácter médico u hormonal como forma de anticoncepción. También minimiza el riesgo de contagio de una enfermedad de transmisión sexual (ETS). Además incrementa la confianza mutua y la intimidad en la pareja y la prepara para el coito. Y cuando se está en medio de una situación ardiente y no se tiene a mano ningún anticonceptivo, el sexo sin penetración es la mejor opción.
En una pareja heterosexual, implica que el semen no se introduce en la vagina, por lo que no hay riesgo de embarazo. De la misma manera, al no haber intercambio de fluidos corporales reduce el riesgo de contagio y transmisión de las enfermedades de transmisión sexual.
Sin embargo, el sexo sin penetración no es del todo seguro. Si el pene se frota cerca de la vagina hay una posibilidad de que se suelten algunos espermatozoides que entren en contacto con los labios mayores, se introduzcan en la vagina y lleguen, luego de un largo camino, a fertilizar un óvulo y se dé el milagro de la vida.
Además, el más mínimo intercambio de fluidos corporales expone también a las ETS. Y muchas parejas encuentran muy difícil el evitar el coito cuando están tan cerca de hacerlo. Entonces, lo mejor es usar un preservativo durante el sexo sin penetración para evitar todo riesgo, incluso en el sexo oral.
El sexo sin coito es una opción incluso para aquellas parejas que han llegado a una rutina y quieren experimentar lo diferente. A practicarlo.
Claves
Al hacer del coito el objetivo único de la sexualidad nos olvidamos de la sensualidad, el disfrute del cuerpo, acariciarse, tener intimidad física con el otro, etc.
El sexo sin coito ofrece igual o mejor sensación de bienestar y satisfacción.
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