Fuente: diariouno.com.ar
Brian Zembic se implantó pechos en 1996 con tal de ganar 100 mil dólares en una apuesta.
Ahora y luego de casi dos décadas de tener pechos de mujer, Brian confiesa que no puede vivir sin ellos, pues sus senos ahora forman parte de su vida. El hombre se niega a deshacerse de sus fieles compañeras, sus "tetas" artificiales.
La apuesta inicial imponía a Brian operarse y permanecer con los implantes mamarios por un año completo, finalmente ha pasado toda una vida luciendo sus bellos senos. De hecho, ha recibido 10 mil dólares por cada año que ha mantenido su "pechonalidad".
Brian es británico, pero vive y trabaja desde hace mucho tiempo en Las Vegas, Nevada, donde se desempeña como mago.
Como cualquier mujer, Brian se enfrenta a problemas como encontrar el sostén adecuado, así como la preocupación de que por la edad se le caigan y luzcan mal.
Los pechos de Brian no le han impedido seguir con su vida romántica y admite que el sexo con su esposa Anita es delicioso. Por su parte, Mika, la hija del hombre con pechos, apoya a su papá pues el dinero que gana con sus implantes pagan las cuentas y la hacen muy feliz.
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