Fuente: losandes.com.ar
Las imágenes de mujeres y hombres que muestran su cariño “a puro beso” (como el que se dieron Calu Rivero y Agustina Cherri) son casi moneda corriente en los medios masivos. Sin embargo, la sexualidad del sujeto difiere de su comportamiento, postura o experimentación. ¿Juego, provocación o una orientación sexual definida?
De repente se besan cómplices. Las bocas se juntan y saborean mientras las dos chicas juegan “a los picos” mientras el jugueteo roza diferentes aristas: la sexualidad, la orientación sexual, las fantasías en ambos sexos, las posturas “selfies” de moda para llamar la atención...Y todo se triplica y rebota como ondas expansivas por todos los medios de comunicación imaginables.
Entonces la pregunta no se hace esperar: “¿Pero son lesbianas esas chicas entonces”?
pregunta la abuela, la madre, y hasta la hija ante la imagen reciente de Agustina Cherry y Calu Rivero en la noche de los Martín Fierro (las chicas “in” sólo por nombrar un ejemplo mediático, porque hay miles en todos lados). Y la dudas sobre sexualidad se abren...
Pero antes de una respuesta que eche un manto de luz sobre tanta desinformación, vale recordar otros ejemplos tan masivos como promocionados. Sin ir más lejos el llamado “beso del alma” (ver aparte) título que la revista “El Gráfico” utilizó en su momento para referenciar la foto (de la noche del 14 de julio de 1996) del beso en la boca, entre Caniggia y su amigo, Diego Maradona.
Imágenes y notas sobran. De hecho la cotidianidad nos toca el hombro todo el tiempo con ellas, y lo fundamental no son “juicios de valor” sobre la definición sexual en ninguna persona, sino la información clara acerca de lo que implica la orientación sexual en un sujeto, respecto a la conducta del mismo.
Por ello, en esta nota el doctor Miguel Palmieri, sexólogo, médico especialista en sexualidad y pareja clarifica dudas y destierra mitos.
¡Pico, pico, pico pico!
Las famosas selfies entre adolescentes suelen ser unos de los disparadores visuales, de los que surgen interrogantes. El especialista responde:
- ¿Cuándo se puede decir que un hombre o mujer es gay, y cuándo sólo se puede hablar de experimentación?
- Ante todo es importante explicar y sobre todo aclarar el tema de la “orientación en el sexo”, ya que es básico y determina el aspecto no sólo sexual de la persona, sino afectivo y amoroso de sujetos del mismo género. Algo que aparece en general en la pubertad, o adolescencia. Pero una cosa es la orientación y otra muy diferente, la conducta sexual.
Por ejemplo, las personas heterosexuales pueden tener conductas homosexuales por curiosidad, por exploración, por diversión o pose, así como también una persona con orientación gay, puede también desarrollar conductas heterosexuales, por ejemplo, para esconder su homosexualidad. Pero en ambos casos, la orientación sexual está clara en ambos en su interior (lo exterioricen o no).
- ¿Qué motiva las conductas sexuales?
- Las conductas de las personas tienen que ver con el entorno, y con el proceso de curiosidad en determinados casos. Incluso con procesos de soledad o deficiencia que han tenido en determinadas relaciones, pero no se vinculan con la orientación sexual. La persona que tiene una orientación homosexual u heterosexual, no es por decisión “voluntariamente cerebral”, sino algo que se genera desde su aspecto interior, afectivo, sexual y de vida. Desde ese “todo” nace la orientación. Se trata de algo fijo en el sujeto.
- Las imágenes que llegan de manera masiva desinforman en este sentido?
- Es un hecho que las publicidades, modismos, posturas y tendencias que nos llegan a través de las imágenes implican un cambio de paradigma, en la manera de comunicarnos, y la llegada global que se tiene al instante. Algo pasa al otro lado del mundo y todos lo vemos. Entonces en la medida que pasa el tiempo, la conductas se naturalizan, aunque no siempre se tiene en claro lo que implican.
En el caso de la adolescencia la pertenencia al par, al grupo es importante en la identidad que se va construyendo, pero la información clara es importante para evitar miedos, dudas, y cuestionamientos a favor o en contra. Porque no se trata de que algo sea “blanco o negro”, sino de aprender como sociedad que así como aceptamos la diversidad en todos los órdenes de la vida, el tema pasa por informarse y vivir una sexualidad plena, en orientación y conducta.
Analía de la Llana - adelallana@losandes.com.ar
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