En La Plata, un hospital para atender a taxi-boys, prostitutas y travestis
Fuente: 26noticias.com
En pleno centro platense, se erige el Centro de Salud “Sandra Cabrera”, el primero del país dedicado a quienes se ganan la vida como trabajadores sexuales. Signado por la confidencialidad, las principales consultas son por métodos anticonceptivos.
Se trata de un emprendimiento llevado adelante por la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina, AMMAR. Allí, prostitutas, travestis y taxi-boys reciben atención médica.
El Hospital se emplaza en pleno centro platense, entre la avenida 1 y 63, y su nombre fue puesto en honor a una mujer que murió a los 24 años de un balazo en la nuca tras denunciar por corrupción a varios policías. Sandra además fue quien trabajó porque la asociación AMMAR sea reconocida a nivel gremial.
El hospital depende del Ministerio de Salud Provincial, y garantizan la confidencialidad. El avance del centro fue paulatino porque los pacientes tenían miedo de que sus datos quedaran registrados, hasta que la asociación logró garantizar el anonimato.
El impulso del proyecto fue explicado por la secretaria general de la Asociación, Susana Martínez: “nos organizamos para ver dónde podíamos tener turnos acordes al horario de trabajo, pero no teníamos respuesta. Además, no te hacían el Papanicolau ni un estudio ginecológico, porque para ocuparse tenías que ser HIV positivo”.
El centro, que es el único en el país, cuenta con diez especialistas. Además de las prostitutas, también lo visitan estudiantes y vecinos.
Tiene cuatro consultorios separados por el pasillo. El equipo médico ya cuenta con dentistas, infectólogos, enfermeros y asistentes social, aunque están centrados en la importancia del control ginecológico.
Desde que abrió el centro, los médicos no dejan de sorprenderse con la desinformación de los pacientes, que llevan a la incorrecta utilización de los anticonceptivos, por ejemplo.
Una infectóloga del centro de salud, Marcela Toller, relató que una paciente le dijo que la sífilis es una enfermedad que se contrae por tener relaciones con perros, y asegura que la mayor parte de las consultas son para pedir análisis de o tratamiento de HIV, hepatitis y síflis.
Entre las tareas del hospital, médicos y prostitutas entregan alrededor de 26.500 preservativos por mes en los lugares donde se consume sexo.
En el barrio no hay reclamos con respecto al hospital, y según cuenta la secretaria de AMMAR, Susana Martínez, “antes la gente se quejaba cuando nos veía cerca. Con el tiempo, el vecino empezó a decir que la policía vigila la zona cuando trabajamos, en el barrio hay menos robos.
En pleno centro platense, se erige el Centro de Salud “Sandra Cabrera”, el primero del país dedicado a quienes se ganan la vida como trabajadores sexuales. Signado por la confidencialidad, las principales consultas son por métodos anticonceptivos.
Se trata de un emprendimiento llevado adelante por la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina, AMMAR. Allí, prostitutas, travestis y taxi-boys reciben atención médica.
El Hospital se emplaza en pleno centro platense, entre la avenida 1 y 63, y su nombre fue puesto en honor a una mujer que murió a los 24 años de un balazo en la nuca tras denunciar por corrupción a varios policías. Sandra además fue quien trabajó porque la asociación AMMAR sea reconocida a nivel gremial.
El hospital depende del Ministerio de Salud Provincial, y garantizan la confidencialidad. El avance del centro fue paulatino porque los pacientes tenían miedo de que sus datos quedaran registrados, hasta que la asociación logró garantizar el anonimato.
El impulso del proyecto fue explicado por la secretaria general de la Asociación, Susana Martínez: “nos organizamos para ver dónde podíamos tener turnos acordes al horario de trabajo, pero no teníamos respuesta. Además, no te hacían el Papanicolau ni un estudio ginecológico, porque para ocuparse tenías que ser HIV positivo”.
El centro, que es el único en el país, cuenta con diez especialistas. Además de las prostitutas, también lo visitan estudiantes y vecinos.
Tiene cuatro consultorios separados por el pasillo. El equipo médico ya cuenta con dentistas, infectólogos, enfermeros y asistentes social, aunque están centrados en la importancia del control ginecológico.
Desde que abrió el centro, los médicos no dejan de sorprenderse con la desinformación de los pacientes, que llevan a la incorrecta utilización de los anticonceptivos, por ejemplo.
Una infectóloga del centro de salud, Marcela Toller, relató que una paciente le dijo que la sífilis es una enfermedad que se contrae por tener relaciones con perros, y asegura que la mayor parte de las consultas son para pedir análisis de o tratamiento de HIV, hepatitis y síflis.
Entre las tareas del hospital, médicos y prostitutas entregan alrededor de 26.500 preservativos por mes en los lugares donde se consume sexo.
En el barrio no hay reclamos con respecto al hospital, y según cuenta la secretaria de AMMAR, Susana Martínez, “antes la gente se quejaba cuando nos veía cerca. Con el tiempo, el vecino empezó a decir que la policía vigila la zona cuando trabajamos, en el barrio hay menos robos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario