Fuente: abc.es
Los yoguis del barrio de Chelsea de Nueva York se quitan la ropa para practicar el «naked yoga» o yoga desnudo, que resurge entre los estadounidenses.
Poco tiene que ver con el yoga que tan de moda se ha puesto en nuestro país, el «hot yoga» o yoga caliente, que se practica a 40 grados de calor. Aunque esta nueva modalidad de la disciplina milenaria pueda resultar «caliente», el motivo es otro. Y es que este yoga se practica sin nada de ropa.
Se conoce como «naked yoga» o «nude yoga», lo cual se traduce textualmente por yoga desnudo. Las clases se imparten en el estudio neoyorquino Bold&Naked del barrio de Chelsea y una clase suelta cuesta 30 dólares. Los instructores especializados aseguran que esta practica ayuda a cada individual a aceptar su cuerpo tal y como es al «exponer su vulnerabilidad y conectar consigo mismo y con otros al nivel más profundo».
Añaden para rematar, que el estar desnudos es la mejor manera para que todos los alumnos sean iguales, sin ropa de marca que pueda indicar cierto estatus económico-social y diferenciarles entre ellos. Y por si tenían dudas, sí, hay clases solo para mujeres, otras solo para hombres, pero también existen clases mixtas.
Un punto a favor es que los alumnos ahorran en ropa de deporte.
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